viernes, 28 de diciembre de 2012

El colmado de Alejandría: 'Qué es un TPV' (1)

A continuación presentamos unos clips formativos con un planteamiento más concreto: una píldora formativa de aproximadamente 5 minutos integrada en un caso práctico.

En el plan de conjunto había hasta 8 casos diferentes. Mi trabajo concluyó al terminar el primer caso 'piloto', dedicado a un pequeño comercio que se planteaba renovar su negocio con el apoyo de un 'asesor TIC', que a su vez participaba en una red de asesores capaz de compartir experiencias y conocimiento.

'El colmado de Alejandría' es un pequeño negocio local que busca el apoyo de Omar, un asesor en nuevas tecnologías que le guiará a partir de las necesidades básicas que detecte. A su vez, Omar como asesor, empieza a experimentar también a su vez los beneficios del trabajo en red.


En el contexto del caso concreto, cómo incorporar tecnologías en un pequeño comercio, la píldora sobre cómo funciona un terminal de punto de venta, TPV, se 'despliega' como un folleto audiovisual.

En este sentido, el formato, como un caso con preguntas y respuestas —documentadas como 'clips' dentro de un 'clip'— facilitan el progreso del diseño de procesos narrativos a un diseño interactivo.

Se podría pensar en casos en que las respuestas, o propuestas de intervención que aquí hace el 'asesor animado' sean elegibles por parte del que está viendo el vídeo. El espectador podría asumir el papel de 'videojugador'.


Nota: Esta primera propuesta piloto fue llevada a cabo por la EOI para el programa 'Asesores TIC' con fondos del Plan Avanza en los primeros meses de 2008.

Gestión del cambio (y 8)

Este es el último vídeo de la serie para el curso on line 'Asesores TIC' que impartió la EOI en otoño de 2007. En los primeros 2'20'' se muestra un diagrama con los aspectos clave de un proceso de gestión del cambio, que está en la base de cualquier innovación.

A partir del minuto 2'20'' se hace un repaso en imágenes mudas del resto del curso. Una revisión que sólo tiene sentido para el que haya podido ver los siete vídeos anteriores.



El propósito de esta serie consistía en aprender un lenguaje —la comunicación audiovisual aplicada en un contexto de formación— además de servir como estímulo en un curso concreto on line. Vista con la perspectiva que da el tiempo, hay muchos elementos mejorables. En aquel momento estábamos experimentando posiblidades.

Surgieron dificultades importantes: la creación de un estilo visual homogéneo, la legibilidad, el ritmo narrativo, la necesidad de incorporar referencias al calendario del curso concreto. Quizá algunas de ellas se resolverían actualmente con otros instrumentos TIC asociados (Prezi, Slideshare, etc.).

En todo caso, el reto sigue presente: elaborar materiales formativos on line fácilmente transferibles. Con algunas características:

  • que se trate de información visual, es decir, capaces de ofrecer simultáneamente información contrapuesta o complementaria,
  • que se presente como audio-visual, utilizando música o palabras como acompañamiento con el fin de proponer una experiencia más completa,
  • que sean narrativos, que planteen casos, relatos, situaciones donde los conceptos deban encontrar una aplicación en un contexto concreto y
  • que sean interactivos, es decir, en el marco de un entorno, donde el participante pueda opinar, responder, realizar una búsqueda o completar un proceso, bien en el marco del vídeo o a través de enlaces complementarios a otros espacios on line (material descargable, foros, wikis, etc.).


Nota: Este proyecto se llevó a cabo en la Fundación EOI, en el otoño de 2007. Personalmente me ocupé de crear el equipo, los procesos de trabajo, mapas de contenido y de realizar algunos guiones.


El proceso comercial (7)

La tercera competencia que debe desarrollarse en consultoría está relacionada con el proceso comercial. En este vídeo se facilita un desglose de los elementos clave. Se trata de un proceso conversacional, entre personas con puntos de vista no necesariamente convergentes desde un inicio.

Se sigue apostando por una comunicación sin voz en off, las palabras están escritas en un diagrama secuencial: antes, durante y después. Y a lo largo de un hipotético día de trabajo dedicado a la relación con el cliente. Así, aparecen elementos claramente narrativos, no sólo expositivos. Y los primeros personajes —todavía mudos— del experimento.


Podría decirse que en la prestación de servicios complejos, como es la consultoría, todo contacto con el cliente forma parte de ese proceso comercial. Es bueno mantener la actitud de diálogo descrita en este video como parte del trabajo a lo largo del resto de fases.

Se trata de una pílodora más breve. Calculamos que los tiempos deben estar en el entorno de los 5 minutos para mantener la atención. Y que el objetivo debe centrarse en estimular, a través de una visión general, el proceso de aprendizaje posterior.

El reto de hacer los guiones a través de personajes, cada vez más narrativos, facilita la comprensión de que se trata de ideas prácticas, funcionales, que deben adaptarse en cada contexto. Se trata de ayudar a comprender, no sólo conceptos, sino experiencias. Y servir de estímulo para llevarlas a cabo.


Nota: Este proyecto se llevó a cabo en la Fundación EOI, en el otoño de 2007. Personalmente me ocupé de crear el equipo, los procesos de trabajo, mapas de contenido y de realizar algunos guiones.

viernes, 21 de diciembre de 2012

El proceso de consultoría (6)

La segunda competencia profesional que debe desarrollar un asesor supone comprender las tareas del consultor como un proceso, en sus diferentes fases. En este video se habla llanamente de:
  • diagnóstico
  • propuestas y
  • seguimiento.




Se apuesta por un estilo gráfico más personalizado, en la medida en que este proyecto piloto debía servir para ir creando una identidad reconocible dentro del programa de difusión del Plan Avanza de aquel año 2007.

Se propone un sistema de comunicación claramente visual, prescindiendo del discurso de un locutor con voz en off, que había sido un soporte clave en las píldoras anteriores.

Se facilita una expresión gráfica de los procesos. Se trata de una apuesta clave para facilitar su comprensión en diversas áreas y niveles de una organización como parte de un lenguaje común esencial para la comunicación, la planificación y la mejora: un lenguaje de signos, de fases, pasos… Una coreografía que refleja un proceso de cambio.

Esta píldora, como las anteriores, debía servir como introducción y estímulo a un área de estudio que se desarrollaba con mayor profundidad en otros textos y ejercicios. Nos servía para explorar lenguajes de comunicación audiovisual aplicados a la formación y el desarrollo de competencias.


Nota: Este proyecto se llevó a cabo en la Fundación EOI, en el otoño de 2007. Personalmente me ocupé de crear el equipo, los procesos de trabajo, mapas de contenido y de realizar algunos guiones.

Comunicación eficaz: barreras y herramientas (5)

El segundo módulo de este programa de introducción de TIC en las Pymes se centra en el desarrollo de competencias profesionales. Y la primera de ellas, la comunicación —humana, se entiende, no la automatizada.


De nuevo se dan vueltas en torno a una mirada analítica en busca de las posibles disfunciones que pueden surgir. Hay una visión mecanicista de la comunicación. No se avanza en una comprensión desde la experiencia, desde las relaciones, desde las redes, desde el feed-back permanente en que estamos enrededados.

Aún con estas limitaciones, esta pílora formativa cumple su función en el intento de hacer reflexionar sobre la importancia del lenguaje, de las conversaciones, de ese 'dar vueltas juntos' en torno a una ocupación, en torno a un objetivo compartido: en busca de una 'común acción'.

Se plantean los aspectos clave de la comunicación y la necesidad de alinearlos en una misma dirección. Falta un sentido de experiencia, que resulta clave cuando se habla de desarrollar una competencia que parece consustancial a la propia identidad, al ser humano, a la manera de ser y expresarse de cada uno.

Se hace referencia a la asertividad como 'modelo', no todavía como experiencia… Se razona sobre un modo de expresión que suele ser básicamente emocional o instintivo. Es un comienzo, pero no garantiza todavía ni el aprendizaje, ni el desarrollo de esa competencia —la comunicación— como un conjunto de habilidades y actitudes, y no sólo como conocimiento.

Se atiende finalmente a un modelo o esquema para la negociación. En este caso, si es útil contar con esquemas previos de análisis y trabajo, en la medida en que se trata de situaciones con un encuadre específico, un marco, unas reglas de juego más o menos explícitas y unos objetivos, convergentes o divergentes, según el caso.


Nota: Este proyecto se llevó a cabo en la Fundación EOI, en el otoño de 2007. Personalmente me ocupé de crear el equipo, los procesos de trabajo, mapas de contenido y de realizar algunos guiones.

Soluciones TIC en las Pymes (4)

Esta cuarta entrega del programa piloto para elaborar 'píldoras formativas' trata de desplegar un mapa con las áreas de aplicación de las TIC en las pequeñas empresas. Desplegar un mapa, donde la información aparece visualmente de manera inmediata, a través de un discurso secuencial, obviamente hace perder espontaneidad al observador, que no puede explorar directamente las diferentes posibilidades según sus intereses. Se trata, por tanto, de una 'visita guiada' a un territorio imaginario: el de las posibilidades de las TIC en la gestión habitual de una pequeña empresa.


En este sentido, sirve también como mapa para pensar una empresa o un proyecto en sus diferentes dimensiones, que vienen dadas por los diferentes tipos de relación que establece. Una empresa o un proyecto, es un nudo en una red de relaciones, que se define por los diferentes conjuntos de relaciones en las que opera.
  • Proveedores y clientes
  • Empleados, colaboradores servicios de asesoría y socios tecnológicos
  • Banco on line y administraciones públicas
Finalmente se facilita una definición del 'cuadro de mando' de una empresa, como una integración, en esquema, de los datos e indicadores de cada area de relaciones.

Desde la perspectiva actual, el lenguaje todavía es principalmente expositivo, no hay una metáfora —la 'visita guiada'— ni un narrador claro que sirva como referencia para seguir el curso de imágenes y conceptos.

Todavía puede resultar útil para esquematizar algunas ideas y elaborar una serie de distinciones clave a la hora de elaborar mapas para la gestión de empresas y proyectos.

Nota: Este proyecto se llevó a cabo en la Fundación EOI, en el otoño de 2007. Personalmente me ocupé de crear el equipo, los procesos de trabajo, mapas de contenido y de realizar algunos guiones.

sábado, 8 de octubre de 2011

Lecciones de Jobs: el camino medio, en cuerpo y alma

He leído resúmenes de las 'lecciones' que deja Steve Jobs tras su muerte, casi todos a partir de sus propias palabras.



El discurso de graducación en Stanford es una obra maestra, no sólo como retórica, sino como ejercicio de 'rendición de vida'. Puede verse o leerse sin que pierda emoción ni capacidad para provocar una reflexión de largo alcance sobre el sentido de una carrera profesional.

Están también las lecciones de los hechos, sujetas a interpretación. ¿Qué he aprendido de Steve Jobs? ¿Qué he aprendido de un diseñador de productos con una trayectoria especialmente intensa?

Hay dos aspectos claves en su filosofía de trabajo: la apuesta por el camino o la vía media y la integración de elementos —hardware y software, cuerpo y alma, configuración y uso—.

El descubrimiento del 'camino medio' supone un punto de inflexión en el aprendizaje del príncipe Siddharta. Jobs era budista, no por nacimiento sino por convicción. Al iniciar su retiro, Siddharta siguió el camino de privaciones tradicional en los yoguis. Cuentan que pasó una barca por el río frente al que se sentaba y vió un músico tocando una guitarra. 'Si la cuerda se tensa demasiado, se rompe', pensó. 'Si no se tensa, no suena.' En ese momento una joven le ofreció un cuenco de arroz y rompió el ayuno iniciando un nuevo ciclo de meditaciones hasta sentirse iluminado.

Esta vía intermedia está expresada de otra manera en el segundo precepto del oráculo de Delfos. 'Conócete a ti mismo', decía una inscripción en la entrada. Y después: 'Nada en exceso'. Puede entenderse como un camino de moderación. También como una práctica de innovación.

En los años setenta ya existía la tecnología necesaria para diseñar ordenadores personales. Pero el mercado estaba divido en dos grandes grupos: las grandes computadoras para empresas, lideradas por IBM, y las calculadoras programables para técnicos e ingenieros de Texas Instruments. Steve Jobs tomó el 'camino medio' como una provocación, como una llamada. Y diseñó un dispositivo que ocupase el lugar intermedio: el ordenador personal. Demasiado limitado para una gran empresa, pero útil para profesiones técnicas y no técnicas, tanto como para tareas personales.

El reto era pensar en la 'informática distribuida', descentralizada, lo que ha supuesto que hoy hablemos de la sociedad del conocimiento. Tal vez existiría internet, pero conectaría sólo instituciones, no particulares. Sería un servicio para universidades y grandes empresas, no accesible a particulares. Esta visión revolucionaria a partir del 'camino medio' se expresa en la primera gran campaña de Apple, en 1983. Hay una apuesta por quebrar las relaciones verticales en favor de la horizontales, de las relaciones entre pares. De crear un nuevo sentido de autonomía a través de la gestión de la información.

El éxito del Macintosh, supuso también la salida de Jobs de Apple, al que acusaban de haber creado una empresa fracturada entre productores y diseñadores. El visionario contrató un CEO, John Sculley para asegurar la empresa en el mercado, mientras él centraba su atención en un pequeño equipo de 'selectos' diseñadores que se sintieron una élite. La fractura se pagó con la salida de Jobs.

A su regreso, en los noventa, Jobs volvía a las andadas con el 'camino medio'. La industria microinformática se escindía en dos mercados: portátiles y sobremesa. Jobs analizó ventajas e inconvenientes. El resultado fue el iMac: un ordenador con la ergonomía de un ordenador de sobremesa, pero integrando todos sus elementos en lo que entonces era un 'huevo', sin disquetera y con conexiones USB.

El reto más complejo, sin embargo, fue el iPhone. En primer lugar porque escapaba a los dominios de la informática. Aunque Apple ya tenía experiencia con los iPods. En un primer momento, el problema era similar: encontrar no una una vía media, sino una vía de integración entre los dos dispositivos más extendidos: el teléfono inteligente (Blackberry) y la agenda electrónica (Palm) en torno al iPod.

Se convirtió en un reto de gestión de conocimiento. En realidad, la pregunta era, '¿qué sabemos hacer y cómo se puede integrar?' Sabemos de procesadores, de pantallas táctiles, sabemos de comunicaciones, sabemos de software, de memorias y baterias, de usos para el ocio, la comunicación y el trabajo. ¿Se pueden integrar en un sólo dispositivo? ¿Cómo sería?

Así nació el iPhone: metiendo en una batidora un teléfono y una agenda electrónica, un reproductor de música y una miniconsola para juegos. Sólo podía funcionar haciendo un esfuerzo por pensar hardware y software como un único diseño. Lo que haría aparecer la AppStore como modelo de negocio.

Finalmente el iPad, el último reto, vuelve a la pregunta clásica, a la raíz: ¿Cuál es el 'camino medio'? En este caso, entre los portátiles y los teléfonos. ¿Tendría sentido un iPhone que pareciese un portátil? ¿Y un portátil que pareciese un iPhone? En la presentación del iPad, el propio Steve hace visible esta reflexión.

Podría resumir la lecciones de Steve Jobs como una manera concreta de abordar (y construir) la realidad a través de algunas preguntas clave: ¿Cuál es el estado del arte? ¿Qué distinciones se hacen, cómo se fragmenta? ¿Cuál sería el camino medio? ¿Cómo articular diferentes saberes en un uso sencillo, al alcance de cualquiera? ¿Cómo diseñar un producto bello, donde se hayan integrado la estructura y sus funciones?

Steve Jobs, como diseñador de productos, es un ejemplo claro del poder de la forma en acción. Dirige el esfuerzo en entornos cambiantes a través de cuestiones clave, de una forma de percepción que surge de un trabajo continuado, una especie de 'jardinería de la mente': lealtad a unas pocas ideas, flexibilidad en la práctica.